TPM es un método de gestión que identifica e elimina las pérdidas existentes en los procesos productivos y administrativos, maximiza la utilización del activo industrial y garantiza la generación de productos de alta calidad y costos competitivos.
Así mismo, provee conocimientos capaces de reeducar a las personas para acciones de prevención y de mejoría contínua, favoreciendo un aumento de la confiabilidad de los equipamientos y de la capacidad de los procesos, sin inversiones adicionales.
Actuando también en la cadena de provedores y en la gestión de materiales, reduce el tiempo de respuesta, aumenta la satisfacción de los clientes y fortalece el posicionamiento de la empresa en el mercado.